Por: Dr.
Pavlusha Luyando Joo
Policlínico
Sagrada Familia
Lima-Perú
luyandojoo@yahoo.com
La familia es la célula básica de
la sociedad; es la estructura fundamental, La familia es el pilar de cuya
solidez va depender la calidad de sociedad que se pretende construir.
La familia es el lugar más
seguro, en donde se transmitirán; el aprendizaje de la cultura, los valores y las
conductas que van a influir en el cuidado de la salud de la persona a lo largo
de su vida. Por ello es imprescindible tomar conciencia de valor inestimable de
la familia en cuanto a la salud integral del individuo.
Si al individuo no se le educa en
el seno familiar en buenas costumbres en cuanto al cuidado de la salud o se le
abandona afectivamente, surgirán personas proclives a enfermedades de salud
mental como la ansiedad, depresión.
De otro lado; si la familia no
cumple adecuadamente el rol que le toca; es decir no cumple cabalmente rol de
educadora, en cuanto a valores se refiere; entonces engendrará tiranos egoístas,
generadores en el futuro de violencia familiar.
Si la familia genera personas
piadosas, solidarias, exitosas, con un profundo respeto a la vida y por Dios,
la sociedad se fortalecerá y puede hacer cambios muy profundos en una comunidad
o hasta en una nación determinada.
Reflexionemos por un momento y
preguntémonos: ¿Qué calidad de individuos se engendran hoy en las familias?
Gran parte de las taras del
individuo se gestan en gran parte de los casos en familias desestructuradas. En
los países donde hay altas tasas de divorcio por ejemplo, se da un elevado y
creciente de jóvenes violentos, deprimidos y muchas veces inadaptados para la
vida en convivencia; esto por hacer sido privados de ambientes y medios
familiares adecuados.
Muchos de los casos de pandillaje,
consumo de drogas, alcohol, cuadros de depresión y ansiedad empiezan por
problemas en la familia.
La calidad de relaciones dentro
de la familia es muy importante, son un gran preventivo para evitar
enfermedades que van desde las patologías psicológicas y físicas.
Por ello es importantísimo que
los esposos luchen por la familia a brazo partido, no solamente esmerándose por
dar beneficios materiales a los hijos, sino a través de un correcto ejemplo y
una vida piadosa.
El diálogo entre la pareja y los
hijos es muy importante, allá donde no hay diálogo es difícil superar los
problemas más cotidianos en la familia, que a la larga pueden traer
consecuencias, sobre todo en los hijos a pesar de provenir de “familias bien
constituidas”. Es decir la familia cumple el rol perfecto si es que en ella
esta: 1.Dios, 2. el buen ejemplo de los padres, y 3.el diálogo entre los
miembros de la familia.
En el caso de la ausencia de
algunos de los padres sea por muerte o separación ,es importante que alguna
figura sustituta (hermano, tío, abuelo) suplanten el vació afectivo dejado por
el padre o madre ausente. Esto asegura
que las consecuencias negativas de la ausencia de los padres se atenúe
considerablemente,
La falta de diálogo es mortal, ya
que sin él no se puede llegar a la reflexión, a la disculpa de la falta, o a
poner el orden necesario en la familia.
Algunos padres buscan colmar únicamente
las expectativas materiales. Esto puede ser un gran error, ya que lo material
no suplanta al diálogo, o a la presencia de los padres.
Otros padres de familia se ven
obligados por necesidad a dejar los hijos en casa para traer un pan,
lamentablemente algunos empleadores no toman en cuenta la importancia de humanizar
el trabajo para el bien social y la salud del individuo.
Por ello los padres de familia
deben estar en alerta constantemente, ya
que el ritmo voraz de los mensajes que inundan la sociedad, están dirigidos a
socavar la estructura familiar.
Los mensajes a través de los
medios pregonan abiertamente y sin ningún límite incitan el libertinaje sexual
de los jóvenes, muestran un mundo descontrolado y sobre todo den a entender a
la población que vivir “sin límites” es lo mejor y lo más moderno, lo cual se
refleja en las elevados porcentajes de jóvenes con enfermedades de trasmisión
sexual, alcoholismo, drogadicción, depresión y ansiedad.
Esto crea una diferencia muy
grande entre lo que debemos aspirar para la familia y el modelo que los medio
masivos ofrecen.
Si queremos una nación mejor y con individuos más sanos cuidemos
mucho a nuestra familia.