DIRECCIÓN: LUZURIAGA 190 - TERCER PISO JESÚS MARÍA, LIMA-PERÚ

jueves, 3 de julio de 2008

ACERCA DE LA NARANJA




Una cura de naranjas de tres días puede conseguir milagros en los trastornos digestivos, dolores de cabeza o procesos reumáticos. Su gran riqueza en vitaminas y en oligoelementos la convierten en la mejor aliada contra el estrés y la depresión.
La naranja incluye diferentes sustancias que contribuyen a mejorar el buen estado del organismo. Entre ellas destacan el calcio, fósforo, hierro, magnesio, potasio, y vitaminas. En concreto, el calcio facilita el desarrollo de los huesos en los niños. El fósforo es sumamente necesario en casos de estrés, personas nerviosas y en las intoxicaciones. El hierro ayuda a la hemoglobinización de la sangre.
El magnesio, combate el estreñimiento. El Potasio actúa como depurativo y disuelve las grasas. La naranja, estimula el jugo pancreático, activa el proceso digestivo gastroduodenal, acciona la secreción clorhídrica y, junto con el ácido cítrico, disuelve el ácido úrico. Es muy beneficioso para las glándulas suprarrenales. La naranja posee también vitaminas A, B, sobre todo, C.
Los cítricos y, en especial, las naranjas, es depurativo, desinfectante y microbicida (mata microbios), estimula la eliminación de todas las sustancias que no se han metabolizado y que reposan en los distintos órganos. Además, su abundancia en sales minerales equilibra las dosis de nutrientes necesarios para el organismo
No sólo corrige las secreciones anómalas de ácido clorhídrico. También disuelve los residuos acumulados y facilita las secreciones necesarias para realizar la digestión.

Limpia el hígado
Los mismos efectos de limpieza y estimulación se producen en el hígado y páncreas, cuya contaminación por acumulación de grasas es la causa más frecuente de diversos trastornos, como dolores de cabeza y mareos. La vejiga- e incluso la próstata- se beneficia del consumo de este cítrico que, por sus propiedades diuréticas, facilita la eliminación de esas sustancias que se van depositando.
La cura de naranjas se ha aplicado también como terapia de los cálculos de riñón, por lo general con muy buenos resultados, de los que salen beneficiadas las glándulas suprarrenales. Pero sobre todo, la naranja ayuda a combatir el estreñimiento. Sus fibras de celulosa facilitan los movimientos peristálticos necesarios para que se produzca la expulsión de las materias de deshecho. La naranja, además de provocar la expulsión, limpia el tracto intestinal y destruye la flora microbiana patógena del colon con una eficacia superior a la de los laxantes químicos.

Arma eficaz en Invierno
La época del año en la que se recomienda de forma especial hacer uso de los cítricos -naranjas, limones, mandarinas, - es el invierno, coincidiendo con su tiempo de maduración y mayor excelencia en la calidad de sus vitaminas. Es precisamente la vitamina C, cuyas concentraciones se encuentran en gran medida en los cítricos, la que conviene tomar en cantidades generosas de cara al invierno, ya que ayuda a combatir los resfríos tan típicos de estas fechas.
La cantidad justa
Esta es una forma sana y natural de combatir los incómodos catarros que en estas épocas otoñales y de invierno parecen no salir de las casas. Tampoco hace falta que la cantidad de cítricos que se ingieran al día sea tremenda, hay médicos que recomiendan un solo zumo diario, preferiblemente por las mañanas. Para los más arriesgados queda el tomarse un vaso de jugo de naranja o limonada; con o sin azúcar, contiene unas tremendas propiedades antioxidantes y depurativas.
Esta es una recomendación que hacen la mayoría de los médicos, para quienes es esencial tomar cada día un zumo de naranja recién exprimida, ya que así este conserva mejor todas sus vitaminas, en especial la vitamina C .

Descubrimientos Estudios recientes realizados por el Instituto Nacional de Cáncer (Estados Unidos) han demostrado la relación directa entre los nutrientes que se encuentran en los cítricos -entre ellos la vitamina C- y la reducción de algunos cánceres.